Sendas (o)cultas es un proyecto de investigación desde la práctica a través de distintas disciplinas artísticas y educativas que aportan una mirada crítica y reflexiva a la desconexión que mantenemos con la naturaleza urbana de nuestros entornos.
El proyecto cuenta con una subvención del área de Gobierno, Cultura y Transporte del Ayuntamiento de Madrid para la ayuda a proyectos que impulsen el desarrollo de iniciativas destinadas a estimular la creación artística, la investigación y el pensamiento contemporáneo, su libre expresión y diversidad, así como su difusión y acercamiento a la ciudadanía
Sendas (O)cultas nace con la idea de poder replicar la metodología en diversos barrios de Madrid. Para la elaboración de la primera senda hemos elegido el distrito de Fuencarral, en concreto un franja de terrenos entre los descampados de la futura operación Chamartín y el poblado Dirigido de Fuencarral C
¿Cómo desbrozamos estas sendas ocultas?
El Objetivo de Sendas Ocultas fue inventariar las buenas prácticas ambientales, sociales, artísticas, educativas que se dan en los barrios ( huertos, lugares de reunión, centros autogestionados, jardines comunitarios, descampados, acciones vecinales, etc…), recopilarlas en una caja de herramientas ( mapas, archivos sonoros u otros formatos) y aprovechar esos aprendizajes para aplicarlos en espacios olvidados del barrio ( desde el punto de vista social, ambiental, urbanístico, etc..).
En la primera Fase de mapeo y reconocimiento del ecosistema pedimos a agentes que consideramos claves o inspiradores en el barrio que nos guiasen por un itinerario personal o temático.
Los recorremos a pie de calle y también estudiamos la información que encontramos sobre ellos. Lo hicimos de forma colectiva, contactando con vecinos y vecinas y colectivos que habitaban esos corredores o que conocían por su conexión con el territorio.
Trabajamos la investigación desde lo físico y lo digital, desde lo pluridiscilplinar, mapeando la naturaleza urbana, pero también proyectos culturales o paisajes humanos.
Creemos firmemente que las soluciones a los grandes problemas de la ciudad se encuentran analizando con cuidado el tejido emergente de la propia ciudad. Por esta razón la segunda fase del proyecto «Extracción de caja de herramientas»fue identificar y traducir los aprendizajes que extraímos del mapeo de las sendas (o) cultas en formatos que permitan aprender.
Los nuevos corredores ecológicos que identificamos escondían un número elevado de inteligencias (especies endémicas, innovaciones ciudadanas, ecosistemas urbanos) y fue parte del proyecto poder identificarlas para hacerlas útil a una escala urbana. Utilizamos para ello algunos de los siguientes formatos de extracción de aprendizajes posibles: Mapas digitales, catálogos, archivos sonoros o manuales.
La Tercera fase fue la de interferencias culturales y artísticas. Para reflexionar sobre las sendas (o)cultas también necesitamos otra forma de mirar, de escuchar y de tocar. Invitamos a artistas, a botánicos, a zahoríes de la cultura urbana, para que nos ayudasen a encontrar y visibilizar los caminos hacia una ciudad más amable y respetuosa con sus entornos: Buscar aguas ocultas, descubrir la procedencia de la flora de nuestro barrio a través de la música, componer una partitura sonora con los sonidos de los pobladores beneficiosos de nuestro entorno que han ido desapareciendo,…fueron algunas de las acciones inspiradoras que realizaremos sobre el territorio recorrido.
El resultado de sus trabajos de investigación a lo largo de un año lo concentramos en un formato de Festival que tuvo lugar a finales de mayo de 2021, en el que programamos tres acciones a modo de "destilado" artístico que mostramos al barrio.
La parte final de nuestro proyecto fue catalogar los PONC ( puntos de olvido naturcultural) que descubrimos en los distintos itinerarios temáticos realizados. Con los aprendizajes recopilados en la caja de herramientas propusimos acciones en estos PONC, ejecutando en uno de ellos ( solar sin uso frente a un mercado municipal abandonado) una acción colectiva de plantación con la intención de recuperar este espacio para los vecinos como un nuevo lugar de reunión.
Tras esta enriquecedora experiencia nuestra motivación y esperanza es seguir aplicando esta metodología de Sendas Ocultas para descubrir toda la riqueza naturcultural que encierram los entornos urbanos que habitamos y que en muchas ocasiones nos pasan desapercibidos